Uno de los retos del año, ¡qué carai, EL RETO del año!, ha sido la Epica Chile. Si no, que se lo pregunten a Eva y al resto de las “Super Nenas” o a su “profesor”: Sandra Santanyes, Mar Franco e Israel Nuñez.
Tras enfrentarse a la Titan Desert, Eva asumía este año otro gran reto: la Epica, una de las aventuras más duras, pero más bellas, del mundo que recorre los 500 km. del desierto de Atacama (Chile). Un desierto que va de la Cordillera de los Andes, hasta la costa del Pacífico cruzando Copiapó y llegando hasta la Bahía Inglesa. Todo ello en seis intensos días, esto es: seis etapas, y montados sobre una bicicleta.

Para este gran reto Eva se estuvo preparando durante meses. Duros meses de entrenamiento que concluyeron el pasado 3 de septiembre.

Tras 29 horas de viaje, nuestro equipo llegaba, cansado pero cargado de ilusión, a Atacama (Chile).

Ninguno imaginaba como de duros iban a ser los seis días que tenían por delante.

Primera etapa:

Primer día: nervios, emoción a flor de piel… que se dejaban ver en las palabras de Eva antes de empezar la carrera:

3… 2… 1 ¡Hasta el infinito y más allá!

La primera etapa fue un pequeño anticipo de todo lo que vendría en las cinco etapas posteriores.
Todo un ejemplo de dureza y esfuerzo.
Una aventura que se truncaba en la primera etapa y que dejaba a muchos de los corredores a 22 km de la meta, pues el sol se ponía y, la organización, por miedo a que oscureciera, decidió recoger a los participantes.
La propia Eva nos lo explicaba en este vídeo:

Terminaba así la primera etapa. Pero, a pesar de los imprevistos, un miembro de nuestro equipo conseguía el segundo puesto del podio: Israel Nuñez se subía a él y lo hacía por las demás compañeras y, claro, por Nacho.

Segunda etapa:

En la segunda etapa el equipo, al completo, llegaba a meta a casi 2.700 metros.
Y, de nuevo, nuestro “profesor”, Israel Nuñez, volvía a subir al podio.

Tercera etapa:

La tercera etapa fue la más accidentada, puesto que Eva, una vez llegada a meta, se desvaneció debido a la deshidratación, la insolación y el cansancio acumulado durante los días de carrera.
La organización la llevó rápidamente al hospital, donde la examinaron y diagnosticaron: bajada de azúcar e infección de orina.
Debido a todo ello, los médicos le aconsejaron, o mejor dicho exigido, descanso y prohibido, también, participar en la cuarta etapa.

Quinta etapa:

La quinta y penúltima etapa de la Epica Chile no contó, tampoco, con la presencia de Eva, y esta vez, tampoco, con la de las otras dos “Supernenas”. Las chicas se quedaron con Eva, ya más recuperada, para darle todo su apoyo y prepararse para la sexta y última etapa.
Eva, después del susto, nos contaba su estado de ánimo y salud:

Sexta etapa:

La sexta etapa sí que contó con Eva.
El equipo al completo, aunó las últimas energías y realizó los últimos quilómetros de la carrera. Era la última etapa y había que disolver, como fuera, el regusto amargo de las etapas anteriores. Tenían que volver a casa con la sensación de haberlo intentado hasta el final. Y lo hicieron:

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Ahora, eso sí, a Eva, si nos descuidamos, nos la dejamos atada en el desierto… 😉

Y un esfuerzo titánico se merecía un recibimiento titánico, también.
Aquí tenéis un recuerdo, bien bonito, del recibimiento de nuestras súper nenas en el aeropuerto de El Prat. Gracias a Edgar Melo por este precioso y emotivo vídeo: https://vimeo.com/182637804/f8878bcbaf

 

Más sobre la Épica en los medios:

http://chile.as.com/chile/2016/09/07/masdeporte/1473249255_382800.html

https://antoniogasso.com/2016/09/23/exitoso-debut-de-la-epica-gaes-atacama-el-dakar-del-mtb/